Destruyen «Tijuana», mural de Enrique Chiu

Antonio Heras 

TIJUANA.- El mural «Tijuana» del artista plástico Enrique Chiu fue destruido por el gobierno de la alcaldesa Monserrat Caballero.

El autor calificó esta decisión gubernamental como una «brutal incultura» y precisó que la donación de esta obra se hizo a la ciudad, no a alguna administración en específico.

Chiú es autor del Mural de la Hermandad que se encuentra en la frontera entre México y Estados Unidos, además que su obra se encuentra en espacios de España, Alemania y Guatemala.

El artista especificó que la tarde de este domingo Daniel Caballero le notificó que el mural se dañó debido a supuestas filtraciones de agua.

«Me ofrecí a repararla, pero me contraargumentaron que ya habían encimado otra obra, lo cual considero como una total falta de respeto a la ciudad y a mi persona como autor», sostuvo.

El mural que se encontraba en el segundo piso del palacio municipal, a un costado de Presidencia, conceptualizaba la esencia de esa metrópoli y se hizo con recursos propios del autor con el propósito de aportar un testimonio de la Tijuana artística y cultural.

Historias de destrucción

No es la primera vez que se destruye un mural en esa ciudad fronteriza.

Durante el gobierno municipal de Jorge Ramos se destruyeron los murales «Frontera Norte» de Carlos Coronado Ortega y de Malaquías Montoya que se encontraban en el parque del CREA en Tijuana.

La medida calificada de «vandalismo gubernamental» por Coronado Ortega, cuya obra muralistica se encuentra en espacios públicos y privados de Baja California, representaba la riqueza y contraste de la frontera desde la perspectiva compartida con  un artista de Nuevo México.

Otra obra de Coronado Ortega, «Tijuana, paso obligado», acrílico sobre henequén, fue embodegado en un sótano del ayuntamiento.

En abril de 2010, Coronado cuestionó con sorna «¿para qué pintamos murales?, mejor hay que dejar que los funcionarios hagan sus propuestas» y advirtió que es sorprendente que «nadie diga nada y todo mundo se quede callado. No valió la pena ni el esfuerzo de plasmarlo o escoger un sitio que ahora lo ocuparán para poner otra cosa o un anuncio de alguna marca».

Con la reconstrucción del muro fronterizo, en febrero de 2024, se destruyó un mural de los artistas Chris Cuauhtli y Javier Salazar que denunciaba la restricción migratoria de México y Estados Unidos.