Nuevo decomiso en Garita de Otay; aseguran “meta” con valor de 730 mil dlls.
- Ocultos en hule espuma transportado en vehículo
OTAY MESA, CAL. — En un nuevo golpe, agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) decomisaron un cargamento de metanfetamina valuado en más de 730 mil dólares.
La intervención tuvo lugar en las instalaciones del puerto comercial de Otay Mesa, donde lo que parecía ser una carga inofensiva de pedestales de hule espuma escondía un cargamento letal.
La mañana del jueves, alrededor de las 8:11 a.m., un hombre de 39 años fue interceptado por agentes de CBP al conducir una camioneta del año 2003.
La carga declarada consistía en pedestales de hule espuma, pero la experiencia y la vigilancia de los agentes les llevaron a realizar una inspección más detallada.
La utilización de un escáner no intrusivo reveló anomalías en la carga, y la intervención de un equipo canino K-9 confirmó las sospechas: la presencia de narcóticos.
La meticulosa revisión de la camioneta desembocó en el hallazgo de 218 paquetes de metanfetamina, meticulosamente ocultos dentro de siete pedestales huecos de hule espuma. Con un peso total de 457 libras, el valor de mercado de este cargamento se estima en $730,800 dólares.
Este decomiso no solo subraya la creatividad de las redes de tráfico de drogas, sino también la destreza y la persistencia de los agentes de CBP para desmantelar sus operaciones.
Rosa E. Hernández, Directora del Puerto de Entrada de Otay Mesa, destacó la adaptabilidad y la eficacia de su equipo frente a las cambiantes tácticas de contrabando.
«Independientemente del tipo de transporte o mercancía que se esté inspeccionando, nuestros agentes han perfeccionado la habilidad para identificar las últimas tendencias de contrabando», afirmó Hernández.
Diojo que el compromiso se extiende más allá de la incautación de narcóticos, por lo que confió en el impacto positivo duradero en las comunidades a las que sirven.
El conductor del vehículo fue detenido y está siendo investigado por el Departamento de Investigación de Seguridad Nacional, mientras que tanto la camioneta como los narcóticos fueron confiscados.
Este evento es parte de la Operación Apolo, una iniciativa regional conjunta que reúne a organismos federales, estatales y locales en un esfuerzo común para combatir la amenaza del fentanilo y otros narcóticos sintéticos ilícitos.
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