
Tijuana.- La Casa de Veteranos en Tijuana celebró el Día de Acción de Gracias entregando pavos y aperitivos a veteranos deportados, en un gesto que busca brindar acompañamiento en una fecha particularmente sensible.
La actividad fue encabezada por Héctor Barajas Varela, director del albergue, quien lamentó que las deportaciones de exmilitares estadounidenses siguen ocurriendo y, peor aún, han incrementado.
Explicó que, pese al contexto adverso, la celebración no podía suspenderse, además, agregó que luego de haberse tomado un tiempo, debido a este incremento de deportaciones de veteranos decidió regresar para seguir apoyándolos.
Detalló que los apoyos se entregaron a veteranos actualmente radicados en Tijuana, así como a familias de exmilitares fallecidos, con la intención “de mantener viva una tradición que les recuerde el hogar”.
“La entrega de comida tiene un profundo sentido emocional, y hoy es un día especial; unos no tienen a sus familias porque no pueden cruzar, y pues les estamos dando algo que les acuerde de tener algo de su casa, de tradiciones que se hacen allá”, dijo.
Consultado sobre la situación actual, subrayó que el problema no es nuevo, pero se agrava. “Los veteranos han sido deportados desde 1996, pero ahora ha incrementado con la nueva administración”, afirmó.
Aunque no existe una cifra exacta, estimó que “más de 120 están en tal vez proceso de deportación”, agregó que, “siguen las deportaciones y hablan de servicio y de honor, pero pues ¿qué tipo de honor? Cuando deportas a alguien y no regresas a casa hasta que solo muera”, expresó. Destacó que actualmente tienen registro de más de 500 personas en más de 50 países del mundo.
ANP



