
Tijuana.- El tema de la migración continúa estrechamente ligado a una de las problemáticas más graves y silenciadas en la frontera: la trata de personas, advirtió el activista en Derechos Humanos, José Luis Pérez Canchola, quien señaló que, aunque los flujos migratorios han disminuido, la violencia y los abusos persisten en Tijuana.
“Ha disminuido evidentemente, pero hay mucho que hacer. Hay cosas que están debajo de la alfombra, extorsiones, secuestros, trata; el tema de la migración está asociado a la trata”, expresó, y subrayó que esta problemática sigue afectando de manera directa a personas en contexto de movilidad, particularmente a mujeres y menores.
Alertó sobre la desaparición de mujeres migrantes que son captadas por redes criminales: “Hay muchas mujeres que están reportadas como desaparecidas, pero las traen como migrantes y luego las venden en cantinas, prostíbulos, en toda la frontera”, denunció y aseguró que se trata de “un fenómeno constante y alarmante”.
Pérez Canchola también destacó la situación de niñas, niños y adolescentes migrantes que viajan solos, quienes generalmente “vienen huyendo de la violencia en sus estados o incluso en centros de Sudamérica y esta condición los coloca en un alto riesgo de explotación y trata también”.
Ante este panorama, consideró indispensable una respuesta coordinada entre los distintos niveles de gobierno entre estados, municipios y la propia federación, con mejores albergues y apoyo a los albergues y organismos, ya que muchas organizaciones trabajan con recursos limitados”.
Finalmente, denunció que “ningún policía municipal tiene facultades para hostigar a los migrantes y pedirles documentos, eso es ilegal y debe ser sancionado por nuestras leyes”, enfatizó y concluyó reiterando que es urgente castigar a quienes extorsionan y violentan a la población migrante.



